Consecuencias de la contaminación en tu piel
La contaminación medioambiental tiene múltiples formatos: las radiaciones solares ultravioletas (UV), hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP), los compuestos orgánicos volátiles (COV), metales pesados, óxido nítrico, las partículas en suspensión (PM), el ozono y el humo de los cigarrillos, y todos ellos pueden afectar negativamente tu piel.
En ese sentido, la doctora Barbara Sturm, química convertida en gurú de belleza, durante una entrevista para Vogue, señala que "cualquier producto anticontaminante tiene que contener (o complementarse con) protección contra los UVA, además de ingredientes que hidratan, fortalecen y protegen la barrera natural de la piel, atrapar y neutralizar los materiales pesados, combatir la inflamación y proporcionar los antioxidantes correctos en dosis suficientes, así como para combatir la destrucción de los radicales libres de las células para ser efectivo".
De esta manera, la contaminación es, por detrás del sol, la mayor impulsora del envejecimiento de la piel.
Ante esto, según Mintel (agencia de inteligencia de mercado) "el 32% de los consumidores chinos de grandes ciudades están preocupados por la contaminación, con el 40% de las mujeres chinas utilizando mascarillas faciales con función de limpieza, lo que supone un crecimiento del 4% desde 2017".
Asimismo, las firmas de belleza han dado un paso al frente para convertirse en las aliadas que paliarán estos efectos.
Con la contaminación, "La mayor preocupación es el aumento de la hiperpigmentación", explicó la Dra. Sam Bunting, dermatóloga cosmética (y experta en belleza) a la redactora Emma Strenner.
Destacaba que un estudio realizado en Alemania comparó las pieles de los residentes de ciudades con las rurales y las mujeres urbanitas experimentaban un 22% más de hiperpigmentación. Pero además, se ha comprobado que otras consecuencias son el taponamiento de los poros y la pérdida de la firmeza de la piel.