En una investigación, el 80 por ciento de las evidencias son digitales: ¿cómo se garantiza su veracidad?

Existen ejemplos emblemáticos como el Caso Pinchazos, en el que estuvo imputado el ex presidente Ricardo Martinelli, donde la evidencia digital construye o hace caer un caso. Para tomar dimensión, se calcula que, actualmente, en una investigación criminal, el 80% de las evidencias son de contenido digital o provienen de un entorno informático. De ahí, la importancia de seguir los procedimientos adecuados para garantizar la veracidad de estas pruebas y que puedan ser aceptadas en los procesos judiciales.

La tecnología avanza constantemente y es ahí donde se encuentra el desafío de los investigadores y la justicia en mantenerse actualizados. Para poder llevar adelante procesos justos es necesario poder recolectar evidencias de todos los dispositivos que nos rodean y forman parte esencial de las comunicaciones. A su vez, es indispensable que sean recolectadas de forma adecuada para garantizar su utilidad.

Las personas que se dedican a la informática forense deben realizar capacitaciones regularmente para seguir el ritmo de las pruebas con las que trabajan. Es por ello que SénecaLab junto con UMECIT, llevan adelante el curso “Informática forense e informes periciales”. El objetivo es desarrollar las competencias esperadas de quien realiza el análisis forense de las evidencias digitales dentro de un proceso investigativo, ya que debe tener la pericia y claridad sobre las herramientas forenses actuales y estándares internacionales en Informática Forense.

Luis Francisco Huertas Gutiérrez, Técnico en Investigación Judicial en servicio de la Policía Nacional de Colombia y docente en Investigación Criminal, será uno de los encargados de dictar los encuentros y explicó algunos de los conceptos más relevantes. “Para que las pruebas sean válidas deben ser manipuladas correctamente, preservando los pilares de la información, la confidencialidad, la integridad y la disponibilidad de la información y obteniendo una autorización previa por parte de un juez de Garantías”, señaló. Y aclaró: “Hay una línea muy delgada en estos casos que está trazada por el derecho a la privacidad, a la intimidad de las personas. En muchas ocasiones, se declara ilegal la obtención de la información de estos dispositivos porque se ha vulnerado este derecho”.

En ese sentido, se refirió al Caso Pinchazos, en el que fue absuelto el ex presidente Martinelli: “La defensa del ex presidente se basó en que el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses no generó un respaldo probatorio de autenticidad frente a las evidencias digitales para evitar el ataque a la integridad de las mismas”. “Entonces, no se pudo garantizar la integridad de las evidencias y el tribunal las excluyó porque no se sabía si habían sido objeto de manipulación”, remarcó.

“El curso va encaminado a investigadores y cuenta con un enfoque técnico, principalmente en el manejo de evidencias digitales, dispositivos móviles y los respectivos informes periciales, justamente para evitar estas situaciones”, indicó. “Es triste ver, cuando se llega a un juicio oral, que una persona se vaya absuelta no porque sea inocente, sino por falta de pruebas. Pero no porque no existan, sino porque fueron recolectadas de manera indebida, sin respetar los protocolos o estándares internacionales”, reflexionó para culminar.

“Informática forense e informes periciales”

El curso forma parte del “Programa para el Fortalecimiento y Eficiencia de la Investigación Criminal de Panamá” de Sénecalab y UMECIT, que busca el fortalecimiento del conocimiento, las competencias y habilidades, con respecto a las diferentes formas metodológicas que se pueden aplicar en la planeación de la investigación, basada en las diferentes técnicas y ciencias forenses La formación técnica especializada en “Informática forense e informes periciales” tiene como principal objetivo enseñar a reconocer las características básicas del perito, herramientas, entornos y normas generales que se requieren para la validación de un proceso de manejo y
análisis de evidencia digital, siguiendo estándares internacionales en informática forense, que garanticen el debido proceso en cualquier pleito legal (judicial, civil o administrativo). 

Se dictará en modalidad virtual y tiene una carga total de 40 horas. Las mismas se completarán en el lapso de un mes a través de actividades de autoaprendizaje, trabajo colaborativo y sesiones sincrónicas que se realizarán dos veces por semana, con una duración de 2 horas cada encuentro.

Está diseñado para que los participantes puedan interactuar constantemente y de forma sencilla, independiente del lugar donde se encuentren. Es recomendado para trabajadores del área de medicina legal, la Policía Nacional, la Dirección General de Ingresos, el Ministerio Público, peritos individuales, el Servicio Nacional de Fronteras (SENAFRONT), el Servicio Aeronaval (SENAN), la Dirección de Investigación Judicial (DIJ) y abogados, así como estudiantes y egresados de criminalística, informática y derecho.