'La casa del reloj en la pared' enfrentó varios retos

'La casa del reloj en la pared' es un film que en primer lugar debía respetar la novela sin alejarse de su esencia juvenil, en segundo tratar de recuperar el espíritu del cine fantástico de los ochenta amparado por la productora Amblin y por último dar forma a una película de miedo para todos los públicos.

De esta manera, Jack Black cuando se le pregunta por el mensaje sobre la aceptación de uno mismo que esconde 'La casa del reloj en la pared', adaptación de la novela juvenil escrita por John Bellairs, señala Estoy cómodo con los personajes excéntricos y raros. Yo nunca he terminado de encajar en la sociedad y eso me arrastra a estos personajes".

Asimismo, Cate Blanchett nos dejó una lección al afirmar: "Intento no pensar de esa forma. Cuando surgió esta oportunidad me pareció fantástica. Por fin voy a trabajar con Jack, con Eli Roth, cuya obra es tan intensa y terrorífica. Y me encantó el guion, eso fue todo. Creo que en esos papeles dramáticos, por llamarlos de algún modo, tienes que encontrar la ligereza y el humor. Y con la comedia debes encontrar la verdad".

De igual forma, la  actriz australiana se lo pasa en grande, como ya hiciera en 'Life Aquatic', 'Thor: Ragnarok' o 'Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal', siendo capaz de transitar de la más ágil mueca a la mayor de las tristezas en segundos.

En este film, el protagonista de 'Escuela de Rock' y 'Amor ciego' interpreta a Jonathan Barnavelt, un desastre como brujo y aún peor como tío, que descuida a su sobrino por detener la maldición de un reloj oculto entre las paredes de su casa.

Para ello, cuenta con la ayuda de su vecina, Florence Zimmerman, una bruja elegante y solitaria a la que da vida Cate Blanchett con la habilidad y profundidad emocional que la caracterizan.