Sheldry Sáez ‘la fe es una fuerza poderosa’
En la vida muchas veces planificamos todo, pero por alguna razón ocurren cosas que hacen que los planes tiemblen y se vean amenazados por algo.
Sin embargo, todo depende de tu actitud y de cómo enfrentes los problemas para seguir adelante y demostrar que si deseas ese sueño y que nada te va a detener. De ti depende avanzar, la manera en que tomes la dificultad y aferrarte a ese sueño aún más fuerte.
Al respecto, Sheldry Sáez compartió una reflexión de algo que le pasó mientras viajaba a New York haciendo realidad sus sueños.
“Aquel viernes cuando partí a Nueva York, el vuelo estuvo tranquilo; pero de un momento a otro todo cambió. Intentamos aterrizar varias veces en New York y no fue posible, una tormenta muy fuerte lo impedía. Entonces fue cuando el piloto anunció que aterrizaríamos en Washington. El viernes tenía un photoshoot a las 3:00 P. M. y ya no iba a poder llegar a esta oportunidad”.
“Fueron alrededor de 36 horas de retraso a raíz del mal clima y sin poder hacer nada. Lo que viví durante esas 36 horas me enseñó mucho... Recordé que NO tenemos el control de todo; pero sí el control de nuestras reacciones ante las dificultades de la vida”.
“Recordé que tener un sueño te hace fuerte, porque lo aguantas todo con tal de lograrlo. ¡Absolutamente todo! Recordé que la vida puede cambiar en un segundo, y es por eso que debemos caminar de la mano de Dios. Recordé que no importa de dónde vienes, cuánto tienes… sencillamente somos una simple partícula de este Universo, vulnerables y expuestos a cualquier situación. Pero a pesar de eso, recordé que no importa lo que vivas si lo haces desde una perspectiva de agradecimiento y crecimiento. Algunas veces Dios nos pone pruebas, para ver qué tan preparados estamos y de esta manera determinar si merecemos hacer realidad ese sueño tan anhelado; pero también sirve como autoevaluación porque nos damos cuenta qué tan sólido está nuestro aprendizaje. Por lo tanto, no presiones, deja que pase lo que tenga que pasar, más bien trabaja en tu reacción”
Para concluir, añadió que al final todo salió muy bien “Pudimos reagendar las fotos y se dieron el mejor día, y hoy me siento a recordar, lo rico que se siente luchar por algo, rasparse las piernas, agarrar más impulso en las caídas, y saber que lo conseguiste porque no te rendiste y porque la fe es una fuerza poderosa”.
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