DGI secuestra cuentas y bienes vinculadas a ShowPro
La Dirección General de Ingresos (DGI) decreta el secuestro de bienes inmuebles y cuentas de sociedades vinculadas a la empresa de espectáculos Showpro, Ashe Entertainment Group, S.A., de World Wide Promotions Group, S.A., como también el de su gerente, Alfredo Arias Arosemena, todo por un monto $10.2 millones, por una posible defraudación al fisco de $1.7 millones.
La DGI encuentra “sospechoso” la existencia de un “aparente contrato de cesión y usufructo de patrocinios” con la sociedad A Entertainment Solutions Corpcon cuando está según su declaración de renta no posee liquidez, otra de las sociedades investigada es World Wide Promotions Group, S.A., la cual en 2011 contrató a 10 artistas musicales por un monto $370 mil 500 sin que se hiciera la pertinente retención de itbms, $61 mil 461 en impuestos, es el monto estimado por la GDI, que se dejaron de pagar al estado.
La DGI habla de un posible ‘Modus OPERANDIi’ realizado por el conglomerado de sociedades en el que “Ashe Entertainment Group, Alfredo Arias y Katia Fábrega han manifestado una conducta deliberada que parece consistir en las constantes disoluciones de sociedades de un mismo grupo empresarial omitiendo el pago de impuestos (...) lo que se configura en indicios de posible defraudación fiscal” como es el caso de World Wide Promotions Group que en 2013 fue disuelta con una morosidad total de impuestos de $376 mil 562, entre otras posibles irregularidades.
La DGI encuentra “sospechoso” la existencia de un “aparente contrato de cesión y usufructo de patrocinios” con la sociedad A Entertainment Solutions Corpcon cuando está según su declaración de renta no posee liquidez, otra de las sociedades investigada es World Wide Promotions Group, S.A., la cual en 2011 contrató a 10 artistas musicales por un monto $370 mil 500 sin que se hiciera la pertinente retención de itbms, $61 mil 461 en impuestos, es el monto estimado por la GDI, que se dejaron de pagar al estado.
La DGI habla de un posible ‘Modus OPERANDIi’ realizado por el conglomerado de sociedades en el que “Ashe Entertainment Group, Alfredo Arias y Katia Fábrega han manifestado una conducta deliberada que parece consistir en las constantes disoluciones de sociedades de un mismo grupo empresarial omitiendo el pago de impuestos (...) lo que se configura en indicios de posible defraudación fiscal” como es el caso de World Wide Promotions Group que en 2013 fue disuelta con una morosidad total de impuestos de $376 mil 562, entre otras posibles irregularidades.
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