Panamá conquistó a Rusia con su actitud

En la Copa del Mundo de Rusia 2018, el mundo fue testigo de la alegría contagiosa panameña, del buen humor que nos caracteriza y todo el sabor panameño al ritmo de décimas y salomas que hacían bailar a cientos aficionados de distintas regiones del mundo. Pues, a donde que quiera que esté un panameño siempre habrá un magnífico ambiente gozoso.

A temprana hora del domingo 24 de junio de 2018, todo el pueblo panameño esperaban ansiosos el enfrentamiento entre la escuadra panameña con la campeona del mundo de 1966, Inglaterra. Un rival muy intimidante debido a la gran plantilla de superestrellas que militan en la Liga Premier inglesa, pero eso no era motivo para el equipo panameño que llegaba animado tras haberle dado buena batalla a una potencia europea como los diablos “Rojos” de Bélgica.

Por su parte, esa peculiar escena protagonizada por los hinchas panameños en la arena de Nizhni, inmortalizó a todo Panamá en Rusia 2018. Y como si no fuera poco, el festejo fue aún más grande, ya que en el minuto 78 nuestro capitán, Felipe Baloy, llenó de orgullo a todo Panamá tras anotar el primer gol en la historia de la selección panameña en una Copa Mundial de la FIFA.

Los sentimientos que experimentó cada panameño después del gol de Baloy son inexplicable. Pero, lo cierto es que en ese preciso instante el mundo entero fue contagiado y consumido por el jubilo panameño que celebró la anotación de Felipe como si fuera una victoria. Solo en Panamá podemos convertir una situación triste en alegría.

Y es que sin duda el simple hecho de que la selección panameña haya llevado la bandera a un Mundial de Fútbol representa gran orgullo y admiración.