Los fantasmas de mi ex
(The Ghosts of Girlfriends Past)


Connor Mead (Matthew McConaughey), fotógrafo de gente famosa, ama la libertad, la diversión y las mujeres… en ese orden. Es un soltero empedernido, sin compromisos, y no le parece nada mal romper con varias novias juntas en llamada en conferencia, porque de todas maneras, ya tiene en vista quién será su próxima chica.
El hermano de Connor, Paul, es un tipo más romántico. De hecho, está por casarse. Lamentablemente, en vísperas del gran evento, la manera en que Connor se burla del amor y el romance arruina la alegría de Paul, y también la fiesta de casamiento. Todos los invitados con buenos deseos quedan asombrados por sus actos, entre ellos Jenny (Jennifer Garner), amiga de Connor desde su niñez, y la única mujer de su vida que siempre pareció inmune a su atractivo encanto.
Cuando ya es casi un hecho que Connor, él solito, arruinó la boda de su hermano, se le aparece el fantasma de su finado Tío Wayne (MICHAEL DOUGLAS). Él había sido el modelo de hombre que Connor siempre quiso copiar: pasaba la vida de fiesta en fiesta, y salía con mujeres legendarias. Ahora Connor, su protegido, continuaba su estilo.
El Tío Wayne sin embargo, tiene un mensaje urgente para Connor, y se lo hace saber a través de los fantasmas de las muchachas que Connor dejó de lado, las del pasado, las de presente, y las del futuro. Ellas lo llevan a través de una reveladora y muy cómica odisea, a través de una vida de relaciones fallidas.
Juntos, finalmente descubren la razón por la que Connor se convirtió en mujeriego, y tratan de ver si aún le queda alguna posibilidad para que encuentre y se quede con el amor de su vida.
Resultados concluyentes, hace que la industria recuerde a otros jóvenes de inmenso talento que dijeron adiós prematuramente.
El hermano de Connor, Paul, es un tipo más romántico. De hecho, está por casarse. Lamentablemente, en vísperas del gran evento, la manera en que Connor se burla del amor y el romance arruina la alegría de Paul, y también la fiesta de casamiento. Todos los invitados con buenos deseos quedan asombrados por sus actos, entre ellos Jenny (Jennifer Garner), amiga de Connor desde su niñez, y la única mujer de su vida que siempre pareció inmune a su atractivo encanto.
Cuando ya es casi un hecho que Connor, él solito, arruinó la boda de su hermano, se le aparece el fantasma de su finado Tío Wayne (MICHAEL DOUGLAS). Él había sido el modelo de hombre que Connor siempre quiso copiar: pasaba la vida de fiesta en fiesta, y salía con mujeres legendarias. Ahora Connor, su protegido, continuaba su estilo.
El Tío Wayne sin embargo, tiene un mensaje urgente para Connor, y se lo hace saber a través de los fantasmas de las muchachas que Connor dejó de lado, las del pasado, las de presente, y las del futuro. Ellas lo llevan a través de una reveladora y muy cómica odisea, a través de una vida de relaciones fallidas.
Juntos, finalmente descubren la razón por la que Connor se convirtió en mujeriego, y tratan de ver si aún le queda alguna posibilidad para que encuentre y se quede con el amor de su vida.
Resultados concluyentes, hace que la industria recuerde a otros jóvenes de inmenso talento que dijeron adiós prematuramente.