¿Se puede viajar a la velocidad de la luz?

En el hipotético caso en que lográramos construir naves capaces de alcanzar esta velocidad, el trayecto no sería tan agradable como parecía ser a bordo del Halcón Milenario. El principal impedimento de un viaje interestelar no se trata de la tecnología, sino el peligroso medioambiente espacial que pone a flote la fragilidad del cuerpo humano.

Si nos desplazáramos en el espacio exterior a la velocidad de la luz moriríamos en cuestión de segundos. Además, por las condiciones del espacio exterior, la nave y sus tripulantes deberían enfrentarse a un haz de radiación que viajando a esa velocidad dañaría la nave y destruiría todo rastro de vida en su interior.

Según las mediciones ningún blindaje sería capaz de liberarnos de la radiación ionizante, por lo que es un obstáculo insalvable para los viajes a la velocidad de la luz. Como solución, habría que conformarse con alcanzar velocidades de solo un 10% de la velocidad de la luz, que difícilmente nos permitiría viajar a la estrella más cercana en el plazo de vida humana, ya que los 4.22 años luz de distancia equivalen a 40 años de viaje.