¿El universo del tatuaje y la oncología encontraron un punto en común?

El cáncer de mamas es una enfermedad que puede dejar muchas secuelas en la vida de las supervivientes; debido a que una mastectomía es una operación compleja, en ese sentido, un estudio de la Gaceta Mexicana de Oncología señala que “ante la mastectomía se producen sentimientos de pérdida, mutilación y desvalorización de la imagen corporal”.

Asimismo, es parte importante comenzar a ‘recomponer’ el cuerpo, pese a que la cirugía reconstructiva no restituye los pezones. Sin embargo, existe una técnica que puede devolver la confianza pérdida: se trata del tatuado de la aureola; una técnica que consiste en tatuar en tres dimensiones que permitan crear replicas asombrosas, incluyendo sombreados y puntillismo para que el pezón quede similar al otro.

Esta tendencia inició en los Estados Unidos y se ha extendido por distintos países, tal parece que el universo del tatuaje y la oncología encontraron un punto de unidad.